El trasplante de cerebro, en realidad, es una utopía
total porque cada cerebro “maneja” el cuerpo de una forma determinada, por
ejemplo tus manos, tus dolencias, tus tics, y si se llegara a intentar el trasplante
de un cerebro (de un cuerpo) a otro cuerpo humano diferente, este no encajaría,
primero porque las masas encefálicas no son iguales, y segundo porque las redes
neuronales y los tejidos tampoco encajarían. En definitiva no es algo como los
chips de una computadora que son intercambiables, no existen estándares, ni se
pueden ajustar o calibrar.
Por otro lado, una persona siendo muy pequeña aprende
a mover los dedos, a caminar, a hablar porque su cerebro encajó con las terminales
nerviosas del cuerpo biológico.
Ahora bien desde el punto de vista espiritual, el espíritu
permanece en el cuerpo humano en tanto y en cuanto el cerebro este intacto,
esto quiere decir que si se produjera una muerte cardiovascular, el cuerpo puede
ser reanimado por electroshock, pero también, si inmediatamente se criogenara
el cuerpo (evitando la muerte de las células neuronales del cerebro), es posible que se reanime a
la persona en el futuro si se llegara a encontrar una cura para la enfermedad
que lo “mato”, y en ese caso, el espíritu original de la persona retornaría a
ese cuerpo, pues es la que tiene la memoria previa, encajaría las piezas
perfectamente como en un rompecabezas la parte física(cerebro y memoria física)
con la espiritual (memoria conceptual). Esto quiere decir que otro espíritu no
podría encajar para nada en dicho cerebro y cuerpo.
En la
Alemania Nazi, existen evidencias que se intentaron trasplantes de cerebros
pero no llegaron a nada, pues desconocían lo antes mencionado, lamentando si el
sufrimiento causado a las personas que fueron sometidas a cruentos experimentos.
En
conclusión, en la muerte cerebral ya nada se puede hacer (el espíritu abandona
el cuerpo), imposible reanimar a una persona; pero en la muerte cardiovascular
(el espíritu esta en el cuerpo en tanto el cerebro no muera) si es posible, y la
reanimación los médicos realizan todos los días en los hospitales con equipos
de electroshock (al menos creo lo intentan hasta un límite razonable de veces)
antes de declarar muerta a una persona.
Recuerdo alguna vez que se estaba buscando una nueva técnica en reemplazo del electroshock, y esa sería empleando shock radiactivos
que sería mas efectivo para reanimar al corazón. Al respecto de esto último
buscare el libro donde se mencionaba ese tema, pues personalmente para mi era
una técnica innovadora y sobre todo permitiría salvar vidas, cuando el shock eléctrico ya no es eficaz.
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